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Santa Bárbara nació como una fábrica de cerveza en la Calle Hortaleza, 2, en 1815. Benito Pérez Galdós la menciona en los Episodios nacionales.
En el año 1900 se abre el primer despacho de cerveza en la propia fábrica y en abril de 1947 abre sus puertas la Cruz Blanca de la calle Alcalá 149, en el edificio conocido como Casa de las Bolas, de construcción neo-mudéjar, proyectado por el arquitecto Julián Marín en la última década del siglo XIX.
En 1965 el despacho fue remodelado y en 1966 se abrió la Cervecería Santa Bárbara de la Plaza del mismo nombre.
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Existió también un Pub Santa Bárbara de estilo irlandés en la Calle Fernando VI, famoso a principios de los 70.
Comidas y bebidas
Para beber: Una caña de Mahou, una clara con casera y una sin alcohol.
Ración: Patatas fritas
Total: 7,6 euros
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Otras raciones: gambas de Huelva, berberechos, ibéricos...
Opinión
La cervecería merece visitarse por su historia y porque sirven muy bien la cerveza. Pero no me gustan nada los sitios que no ponen tapa y me parece un robo que cobren 2,40 euros por un plato pequeño de patatas fritas, por muy ricas que estén.
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Lunes a domingo: de 9:00 a 00:00 horas
Teléfono: 91 319 04 49
Página web: www.cerveceriasantabarbara.com
A este me llevaron unas amigas ovetenses,contándome que era uno de los "clásicos". Después fui alguna otra vez porque me quedaba por la zona.
ResponderEliminarLas patatas están ricas pero reconozco que me gustan mucho más las otras tabernas que fuí descubriendo después
Las gambas que te ponen aquí son muy ricas. Es un clásico de la zona de Alonso Martínez y tiene el encanto de los locales tradicionales auténticos. Posiblemente son precios de ese público que pilla mesa y se queda toda la tarde. Más que la bebida, pagas el estar.
ResponderEliminarSí Lammermoor, es un lugar agradable, pero creo que mejoraría con algún pequeño detalle, no creo que el coste de una tapita les vaya a arruinar.
ResponderEliminarEl Deme, es verdad, las gambas son buenas pero si cobran 2,4 euros por las patatas fritas de la foto, no me quiero imaginar lo que te clavan por las gambas, hace tiempo que no las pruebo.
Los antiguos camareros eran lo mejor del lugar, ya no queda ninguno. Se llenaba y es muy incómodo estar tocando el brazo del que está en la mesa de al lado. Gambas buenas, pero caras, caras. Buena cerveza pero esa ya la tenemos en otros lugares con mayor encanto.
ResponderEliminarEl pub Santa Bárbara nada tenía que ver con la Cervecera.
Mucho pijo, en Goya más.
Y las patatas fritas no son de las mejores, ni mucho menos.
Saludos, Enrique
Lo del pub lo cuentan en su web y en el resto de apreciaciones estoy de acuerdo Liberty.
EliminarMe parece que después de pagar 3,10 euros por una cerveza no se dignen poner un aperitivo, ni siquiera un detalle como unas pobres patatas fritas que si las pides te clavan.Espero que cambien en este sentido porque sino se arriesgan a que la gente no vaya
ResponderEliminarSí, no entiendo lo del aperitivo, es que es tan absurdo, el coste en relación con la consumición es minúsculo... Al final se acabará convirtiendo en un sitio donde sólo irán los güiris...
EliminarEn la página web de la Hemeroteca Digital he encontrado un curioso aviso de 1825 que no he visto citado por nadie. Dice textualmente "En el café de S. Sebastian se continúa sirviendo desde las diez de la mañana bebidas heladas, sorbetes y quesitos de varias clases, vino y CERVEZA DE SANTA BÁRBARA á la nieve." Aparece en Diario de Avisos de Madrid, 8 de septiembre de 1825.
ResponderEliminarEste café de San Sebastián estaba situado en la esquina de la calle San Sebastián con la Plaza del Ángel y es el lugar donde supuestamente transcurre la acción de la obra de teatro "La Comedia Nueva o el Café" de Leandro Fernández de Moratín.
En 1833 la cerveza de Santa Bárbara debía ser popular porque un hombre que se sentó con sed a beber en el Paseo del Prado pidió "la feliz combinación de la limonada y cerveza (por supuesto de santa Bárbara)" Aparece en El Correo (Madrid), 29 de mayo de 1833.
Muchas gracias por los apuntes Osoyoga, me han encantado los modos de la época: sorbetes y quesitos, feliz combinación de limonada y cerveza... ¡maravilloso!
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